Continuando con el tema de la tecnología del futuro podemos materializar esas aplicaciones analizando un material muy interesante “El Grafeno” que es toda una revolución tecnológica que puede estar muy presente en un futuro no muy lejano. Y lo bueno es la cantidad de aplicaciones como lo puede ser desde un despertador o un dispositivo GPS, hasta una computadora portátil de un grosor inferior al de un folder, y muy interesante, capaz de recargarse sin baterías externas (sólo con la energía solar) y que se puede enrollar en nuestra muñeca y usarse como reloj. Algo aun más interesante es su uso médico, ya que con este material se pueden crear tejido muscular artificial el cual podrá ser de gran aplicación en el campo medico.
Ahora si la pregunta compuesta del millón es ¿cuáles son sus propiedades, de donde vamos a sacar este material, cuanto costara, y muy importante que impacto ambiental tendrá la producción de este material, y de sus aplicaciones?
Como propiedad interesante podemos tomar el ejemplo dentro de la informática ya que puede multiplicar por cien la velocidad del mejor procesador actual en una lámina flexible, ligera, y más dura que el diamante.
Además ojo lo interesante, está presente en lo más cercano que se puedan imaginar: el grafito, es decir, en una una simple mina de un lápiz. Como quien dice "hemos utilizado día a día el grafito sin saber sus utilidades". Y gracias a un lápiz, analizando sus restos pegados en una tira de celo, lo descubrieron hace seis años los recientes ganadores del premio Nobel de Física, los rusos André Geim y Konstantin Novoselov. Un procedimiento rutinario que ya está siendo devorado por la producción a gran escala.
Por otro lado, su fabricación es extraordinariamente barata y cualquier laboratorio puede obtenerlo, ya que el carbono es un material ampliamente conocido.
